miércoles, 27 de julio de 2022

MIÉRCOLES 17 DE AGOSTO DEL 2022

Primera Lectura. Ezequiel 34,1-11.

1Me dirigió la palabra el Señor:
2-Hijo de Adán, profetiza contra los pastores de Israel, profetiza diciéndoles: ¡Pastores!, esto dice el Señor:
¡Ay de los pastores de Israel
que se apacientan a sí mismos!
¿No son las ovejas lo que tienen
que apacentar los pastores?
3Os coméis su enjundia, os vestís con su lana;
matáis las más gordas,
y las ovejas no las apacentáis.
4No fortalecéis a las débiles,
ni curáis a las enfermas,
ni vendáis las heridas;
no recogéis las descarriadas,
ni buscáis las perdidas
y maltratáís brutalmente a las fuertes.
5Al no tener pastor, se desperdigaron
y fueron pasto de las fieras salvajes.
6Mis ovejas se desperdigaron
y vagaron sin rumbo
por montes y altos cerros;
mis ovejas se dispersaron por toda la tierra,
sin que nadie las buscase siguiendo su rastro.
7Por eso, pastores, escuchad la palabra del Señor:
8¡Lo juro por  mi vida! -oráculo del Señor.
Mis ovejas fueron presa,
mis ovejas fueron pasto
de las fieras salvajes, por falta de pastor;
pues mis pastores no cuidaban mi rebaño,
los pastores se apacentaban a sí mismos
y mi rebaño no lo apacentaban.
9Por eso, pastores, escuchad la palabra del Señor:
10Esto dice el Señor:
Me voy a enfrentar con los pastores:
les reclamaré mis ovejas,
los quitaré de pastores de mis ovejas
para que dejen de apacentarse
a sí mismos, los pastores;
libraré a mis ovejas de sus fauces,
para que no sean su manjar.
11Así dice el Señor:
Yo mismo en persona buscaré mis ovejas
siguiendo su rastro.

Explicación.

34,1-2 Ezequiel ha tratado de la responsabilidad de generaciones e individuos, pero no niega la responsabilidad de los dirigentes. La del profeta ha quedado bien clara en la parábola del centinela; ahora toca la vez a los jefes del pueblo vistos en imagen de pastores. La imagen es tradicional y se apoya principalmente en la figura de David. Hay que leer este capítulo en paralelismo con Jr 23.

            Al esquema clásico de juicio, denuncia del delito y anuncio de la pena, añade magníficas promesas para las víctimas. La imagen está tratada con riqueza de particulares, el esquema se ramifica con libertad frondosa, sin dañar la coherencia. Teniendo en cuenta fórmulas de transición, "por eso así dice Yhwh", y de reconocimiento, voy a esquematizar con cierta amplitud el movimiento del oráculo:

34,2-4 ¡Ay!, denuncia del delito, en segunda persona:

34,5-6 consecuencias: las víctimas

34,7-8 Por eso, escuchad la palabra del Señor: recapitula el delito

34,9 Por eso, escuchad la palabra del Señor

34,10 así dice Yhwh: castigo: serán depuestos; tercera persona

34,11 Seré yo el pastor.

34,5-6 La dispersión primero es local, dentro del territorio; después se extiende como destierro o diáspora.

Salmo. 23,1-6.

Ez 34; Jn 10

1 El Señor es mi pastor: nada me falta.
2 En verdes praderas me hace recostar,
me conduce hacia fuentes tranquilas
3 y repara mis fuerzas;
me guía por senderos oportunos
como pide su título.
4 Aunque camine por cañadas oscuras,
nada temo: Tú vas conmigo;
tu vara y tu cayado me sosiegan.
5 Me pones delante una mesa
frente a mis enemigos.
Me unges con perfume la cabeza,
mi cabeza rebosa.
6 Tu bondad y lealtad me escoltan
todos los días de mi vida;
y habitaré en la casa del Señor
por días sin término.

Explicación.

23. Este salmo es uno de los favoritos del salterio: por la tradición de David pastor y por la culminación en la imagen del Buen Pastor. También por su sencillez y riqueza: en dos imágenes o escenas de conjunto comprime un número inesperado de símbolos elementales. Las imágenes son dos: el pastor en 1-4, el anfitrión en 5-6. El verso central, 4b, se une a lo que precede por la imagen, a lo que sigue por la aparición de la segunda persona.

La imagen del pastor está desarrollada con realismo y concreción, por medio de rasgos breves que evocan la escena. Hay que dejarse conducir por la imaginación, sin espiritualizar: el césped verde con una fuente, para tumbarse, reposar y recobrar fuerzas; las roderas del camino, la cañada al oscurecer, la vara que encamina con un toque y el callado que golpea rítmica y sonoramente el suelo. La imagen suelda dos planos de significado en una arista común, desde la cual se dominan ambas vertientes en mirada simultánea. Lo dicho de las ovejas vale del hombre; lo personal se adelanta a primer plano en el "tú vas conmigo".

La imagen libera varios símbolos, arquetípicos o culturales. La imagen del pastoreo se inscribe en las relaciones del hombre con los animales, dominados y domésticos. El verde aplaca los ojos, revela a la tierra materna y acogedora. El agua quita la sed y suscita energía vital. El caminar es experiencia radical. La oscuridad evoca miedos infantiles y temores no aclarados; en ella se siente con más fuerza la presencia amiga. La potencia simbólica de estos rasgos no se agota en la primera lectura.

La imagen del huésped. En la cultura nomádica es fundamental la hospitalidad. Podemos imaginar un fugitivo de su clan que pide asilo. El jeque lo acoge en su tienda, le ofrece protección, comida y bebida, ungüentos aromáticos. Al observar la escena los enemigos perseguidores se detienen en la puerta o cortina: el jeque lo protege. Cuando ha terminado, el jeque le ofrece una escolta que lo acompañe en el camino hasta casa, que es la casa del Señor. Esta parte añade los símbolos de comer y beber.

Las tradiciones del éxodo nos dan una clave para comprender la unidad de las dos imágenes: el Señor guía a su pueblo por el desierto como a un rebaño, buscándole agua y comida y reposo. Cuando llegan a la tierra prometida, el Señor los recibe como anfitrión en su territorio: Éx 15,13; Sal 68,11; 77,21. Dos veces el poeta interrumpe el descanso con el camino, no lo contrario. ¿Toda la vida en camino o una morada final en el templo? El poema termina con una tensión no resuelta, como si una y otra vez se volviera a empezar.

23,1 Es frecuente la imagen de Dios pastor: Sal 78,52; 80,2; Is 40,10s; Jr 23,4.

23,3 El hebreo shem puede significar nombre, título, fama. Aquí encaja mejor lo segundo.

23,4 "Me sosiegan": el verbo es frecuente en Is II: 40,1; 49,13; 51,3.12.19; 52,9.

23,5 El uso de perfumes en los banquetes está atestiguado abundantemente.

23,6 "Bondad y lealtad" personificados como escolta.

TRANSPOSICIÓN CRISTIANA.

Jn 10,1-18 presenta a Jesús como el bueno o auténtico pastor (Ez 34). La primera carta de Pedro sintetiza en la imagen cristología con eclesiología: 2,25; 5,2-4. A partir de esos datos se puede conducir una reflexión sobre símbolos del salmo y sacramentos.

Evangelio. Mateo 20,1-16.

1 porque el reinado de Dios se parece a un propietario que salió al amanecer a contratar jornaleros para su viña.
2 Después de ajustarse con ellos en el jornal de costumbre, los mandó a la viña.
3 Salió otra vez a media mañana, vio a otros que estaban en la plaza sin trabajo
4 y les dijo:
                      - Id también vosotros a mi viña y os pagaré lo que sea justo.
                      5 Ellos fueron.
                      Salió de nuevo hacia mediodía y a media tarde e hizo lo mismo.
6 Saliendo a última hora, encontró a otros parados y les dijo:
                      - ¿Cómo es que estáis aquí el día entero sin trabajar?
                      7 Le respondieron:
                      - Nadie nos ha contratado.
                      Él les dijo:
                      - Id también vosotros a la viña.
                      8 Caída la tarde, dijo el dueño de la viña a su encargado:
                      - Llama a los jornaleros y págales el jornal, empezando por los últimos y acabando por los primeros.
                      9 Llegaron los de la última hora y cobraron cada uno el jornal entero.
10 Al llegar los primeros pensaban que les darían más, pero también ellos cobraron el mismo jornal por cabeza.
11 Al recibirlo se pusieron a protestar contra el propietario:
                     12 - Estos últimos han trabajado sólo una hora y los has tratado igual que a nosotros, que hemos cargado con el peso del día  y el bochorno.
                     13 Él repuso a uno de ellos:
                     - Amigo, no te hago ninguna injusticia. ¿No te ajustaste conmigo en ese jornal?
14 Toma lo tuyo y vete. Quiero darle a este último lo mismo que a ti.
15 ¿Es que no tengo libertad para hacer lo que quiera con lo mío?, ¿o ves tú con malos ojos que yo sea generoso?
                     16 Así es como los últimos serán primeros y los primeros últimos.

EXPLICACIÓN.

19,30-20,16.    "Todos", lit. "muchos", en el sentido de totalidad discreta: aunque sean primeros, adjetivo con sentido concesivo. La viña, figura del pueblo de Dios, antes Israel (Is 5,7; Sal 80,9s.15s), ahora la comunidad de Jesús (20,1). La parábola ilustra el principio inicial (19,30): la cantidad o calidad del trabajo o del servicio, la antigüedad, las diversas funciones, el mayor rendimiento no crean situación de privilegio ni son fuente de mérito, pues el servicio es respuesta a un llamamiento gratuito. El sentimiento del propio mérito crea descontento y división (11s.15). El servicio no se hace por deseo de recompensa, sino por la espontánea voluntad de ayuda a los demás (5,7.9). Se trabaja por crear igualdad, y ésta debe ser patente en la comunidad (cf. 18,1-5).

MARTES 16 DE AGOSTO DEL 2022

 PRIMERA LECTURA. EZEQUIEL 28,1-10.

Contra el rey de Tiro (Is 14).

1Me dirigió la palabra el Señor:
2-Hijo de Adán, di al príncipe de Tiro:
Esto dice el Señor:
Se hinchó tu corazón y te dijiste:
“Soy Dios, entronizado en solio de dioses
en el corazón del mar”;
tú que eres hombre y no dios
te creías listo como los dioses.
2¡Si eres más sabio que Daniel!,
ningún enigma se te resiste.
4Con tu talento, con tu habilidad,
te hiciste una fortuna:
acumulaste oro y plata en tus tesoros.
5Con agudo talento de mercader
ibas acrecentando tu fortuna,
y tu forma te llenó de presunción.
6Por eso, así dice el Señor:
Por haberte creído sabio como los dioses,
7por eso traigo contra ti
bárbaros pueblos feroces;
desnudarán la espada
contra tu belleza y tu sabiduría,
profanando tu esplendor.
8Te hundirán en la fosa,
morirás con muerte ignominiosa
en el corazón del mar.
9Tú que eres hombre y no dios,
¿osarás decir: “Soy Dios”,
delante de tus asesinos,
en poder de los que te apuñalen?
10Morirás con muerte de incircunciso,
a manos de bárbaros.
Yo lo he dicho –oráculo del Señor-.

EXPLICACIÓN.

28,1-10. Lo peculiar de este juicio es que, no contento con enunciar el delito, analiza el proceso psicológico. Empieza la habilidad mercantil, que produce y acumula riquezas, de las cuales nace la presunción, hasta la arrogancia de considerarse dios. Puede compararse con el proceso analizado en Dt 8 (S. Ignacio indica: riquezas, vano honor del mundo, crecida soberbia). A la presunción sigue la caída (Prov 18,12); otros pueblos serán ejecutores. En el momento de la ejecución, el juez dirige al reo una pregunta irónica: la muerte devuelve al presunto dios su dimensión humana; compárese con el Sal 82.

28,2. En la frase resuena algo del ceremonial de corte, recogido y adaptado en Sal 2; 45; Is 9. Ezequiel da a la expresión toda su fuerza blasfema: compárese con la réplica de Is 31,3.

28,3. Daniel es una figura legendaria cananea; su nombre significa Dios juzga. Juzgar rectamente es acto de sabiduría, como ilustra la anécdota de 1 Re 3,16-28. Pero aquí se habla de otras habilidades.

28,4. El verso resume el capítulo precedente.

28,6-7. Bárbaros que no respetan belleza, ni riqueza, como en Is 13,17.

28,8. Muerte “ignominiosa”, que profana (v.7), o de apuñalados, ajusticiados (v.9); el adjetivo consuena con riqueza: hll hyl. Coloca “la fosa” en el corazón del mar (cfr. Jon 2).

28,10. No conocemos la modalidad de esa muerte, que los israelitas consideraban particularmente afrentosa.

SALMO. DEUTERONOMIO 32,26-28.30.35-36.

26Yo pensaba:
“Voy a dispersarlos
y a borrar su memoria
entre los hombres”.
27Pero no; que temo
la jactancia del enemigo
y la mala interpretación
del adversario,
que dirían:
“Nuestra mano ha vencido,
no es el Señor
quien lo ha hecho”.
28Porque son una nación
que han perdido el juicio
y carece de inteligencia.
30¿Cómo es que uno
persigue a mil
y dos ponen en fuga
a diez mil?
¿No es porque su Roca
los ha vendido,
porque el Señor
los ha entregado?
35Mía será la venganza
y el desquite
en la hora en que tropiecen
sus pies,
pues el día de su perdición
se acerca
y su suerte se apresura
36-porque el Señor
defenderá a su pueblo
y tendrá compasión
de sus siervos-.
Cuando vea que
sus manos flaquean,
que se consumen
amos y criados.

EXPLICACIÓN.

32,26. Acabar con Israel en el presente y el futuro: dispersos y asimilados por otras naciones, dejarán de ser un pueblo con nombre propio.

32,27. El enemigo no sabe interpretar la historia en clave teológica: se agribue las victorias (como Israel la prosperidad, 8,17): véanse Is 10,13-14; 37,24-25; 47,8.10.

32,28-30. Nos inclinamos a pensar que este “pueblo” es Israel, que tampoco sabe interpretar la historia, y atribuye a su fuerza lo que es don de Dios (Lv 26,8; Dt 28,7).

32,34-35. El Señor va a actuar como juez. El delito consta en su archivo judicial, la sentencia será ejercicio de la justicia “vindicativa”, o sea castigo legal del delincuente.

32,36. Irrumpe la voz del recitador. En vez de “porque”, podría significar “cierto”. El anuncio se lee en Sal 135,14, lo cita 2 Mac 7,6

EVANGELIO DE MATEO 19,23-30.

23 Jesús dijo a sus discípulos:
                   - Os aseguro que con dificultad va a entrar un rico en el reino de Dios.
24 Lo repito: Más fácil es que entre un camello por el ojo de una aguja que no que entre un rico en el reino de Dios.
                   25 Al oír aquello, los discípulos se quedaron enormemente impresionados y decían:
                   - En tal caso, ¿quién puede subsistir?
                   26 Jesús se les quedó mirando y les dijo:
                   - Humanamente ese es imposible, pero con Dios todo es posible.
                   27 Intervino entonces Pedro:
                   - Pues mira, nosotros ya lo hemos dejado todo y te hemos seguido. En vista de eso, ¿qué nos va a tocar?
                   28 Jesús les dijo:
                   - Os aseguro que cuando llegue el mundo nuevo y el Hombre se siente en su trono de gloria, también vosotros, los que me habéis seguido, os sentaréis en doce tronos para juzgar a las doce tribus de Israel.
29 Y todo aquel que por causa mía ha dejado casa, o hermanos o hermanas, o padre o madre, o hijos o tierras, recibirá cien veces más y heredará vida definitiva.
30 Pero todos, aunque sean primeros, serán últimos, y aunque sean últimos, serán primeros,

EXPLICACIÓN.

Entrar en el Reino (23s) equivale seguir a Jesús (v.21; cf. 19,14). Práctica imposibilidad de que los ricos renuncien a su riqueza para hacerse discípulos. Subsistir (25), escapar/salvarse de un peligro: poner la vida física a salvo (16,22) evitando la indigencia. Humanamente, la única manera de subsistir está en la riqueza, que causa miseria en otros; con Dios (5,3: "tienen a Dios por rey"), los pobres no pasarań necesidad (6,19-34; 14,20; 15,37). Pedro pide seguridades concretas (27). El mundo nuevo comienza con la resurrección de Jesús; se siente en su trono de gloria (cf. 26,64). El Israel mesiánico (los Doce), con su seguimiento de Jesús, hará que, por contraste, el antiguo Israel, que rechaza el Mesías, quede juzgado y condenado. La renuncia a los bienes (29) no desembocará en la miseria, sino en una abundancia centuplicada (5,5).

                     "Todos", lit. "muchos", en el sentido de totalidad discreta: aunque sean primeros, adjetivo con sentido concesivo. La viña, figura del pueblo de Dios, antes Israel (Is 5,7; Sal 80,9s.15s), ahora la comunidad de Jesús (20,1). La parábola ilustra el principio inicial (19,30): la cantidad o calidad del trabajo o del servicio, la antigüedad, las diversas funciones, el mayor rendimiento no crean situación de privilegio ni son fuente de mérito, pues el servicio es respuesta a un llamamiento gratuito. El sentimiento del propio mérito crea descontento y división (11s.15). El servicio no se hace por deseo de recompensa, sino por la espontánea voluntad de ayuda a los demás (5,7.9). Se trabaja por crear igualdad, y ésta debe ser patente en la comunidad (cf. 18,1-5).

LUNES 15 DE AGOSTO DEL 2022

PRIMERA LECTURA. Apocalipsis 11,19; 12,1-6.10

1119 Se abrió en el cielo el santuario de Dios y en su santuario apareció el arca de su alianza; se produjeron relámpagos, estampidos, truenos, un terremoto y temporal de granizo.
12 1 Apareció en el cielo una magnífica señal: una mujer envuelta en el sol, con la luna bajo sus pies y en la cabeza una corona de doce estrellas.
2 Estaba encinta, gritaba por los dolores del parto y el tormento de dar a luz.
3 Apareció en el cielo otra señal: un gran dragón rojo con siete cabezas y diez cuernos, y en las cabezas siete diademas.
4 Su cola barrió la tercera parte de las estrellas del cielo y las arrojó a la tierra.
El dragón se quedó delante de la mujer que iba a dar a luz, para devorar a su hijo cuando naciera.
5 Ella dio a luz un hijo varón, destinado a regir a todas las naciones con cetro de hierro (Sal 2,9); pero arrebataron a su hijo y lo llevaron hasta Dios y su trono.
6 La mujer huyó al desierto, donde tiene un lugar reservado por Dios, para que allí la sustenten mil doscientos sesenta días.

10 Oí en el cielo una aclamación:
-¡Ha sonado la hora de la victoria de nuestro Dios,
de su poderío y de su reinado,
y de la potestad de su Mesías!
Porque han derribado al acusador de nuestros hermanos,
al que los acusaba día y noche ante nuestro Dios;


EXPLICACIÓN.

11,19. La acción divina que se anuncia es una teofanía, simbolizada por la apertura del santuario, la aparición del arca, la tempestad y el terremoto la presencia divina hace vacilar la tierra, cf. Éx 19,18; Sal 18,8; 97,4; Hab 3,6.10) (19). El arca de la alianza, garantía de la fidelidad divina, en el momento del juicio (19)

12,1-6.  Comienza la exposición del contenido del librito. La persecución al mensaje cristiano es la concreción histórica de una lucha más profunda. Descrita en términos míticos, es la lucha entre Dios y el dragón, figura del mal, identificado con Satanás, "el Enemigo" y "la serpiente antigua", que causó la muerte del hombre. En términos históricos, es la desmitificación del poder, que, gracias al testimonio de Jesús y al de sus seguidores, pasa de ser considerado como divino (el dragón en el cielo) a ser visto como el Enemigo del hombre y adversario del plan de Dios; el designio divino liberador se propone destruir el poder, que oprime al hombre y le impide alcanzar su plenitud.

Se abre esta sección con la presentación de la comunidad cristiana como realidad trascendente insertada en la historia.

Magnífica ( lit. "grande") señal, imagen portadora de un mensaje de fundamental importancia ; en el cielo implica la trascendencia divina. Teniendo en cuenta los símbolos usados por los profetas, una mujer, que es esposa y madre hace pensar en la relación de Dios con el pueblo y en su fecundidad. Envuelta por Dios de sol: amor de Dios hacia ella (cf. Os 52,1; 61,10); la luna bajo sus pies, dominio sobre la sucesión del tiempo, existencia por encima de las vicisitudes humanas (cf. Sal 89,37s, en contexto de alianza); corona, realeza; de estrellas, dimensión trascendente; doce, el nuevo Israel universal (cf. 21,12-14). El atuendo de la mujer indica pues, la realidad trascendente del nuevo pueblo de Dios, la comunidad cristiana.

Madre fecunda (2): parto particularmente doloroso (a través de la persecución; cf. Jn 16,20); tensión de la comunidad hacia una realidad nueva, el nacimiento del Hombre (el hombre nuevo, la plenitud humana, cuyo prototipo es Jesús; cf. Jn 16,21) en cada uno de sus miembros.

Otra señal (3), nuevo mensaje procedente también de la esfera divina (en el cielo). Dragón, símbolo de una voluntad de mal que consigue sojuzgar a los hombres y escapa de su control; fuerza tremenda y temible (grande), sanguinaria (rojo), con plena vitalidad (siete cabezas): máxima expresión del mal, pero su fuerza (cuernos), aunque grande, no es ilimitada (diez). Esta fuerza de mal se encarna en el poder político (diademas). Quiere acaparar el poder (barrió la tercera parte de las estrellas del cielo, figura de los príncipes o poderosos que derroca, cf. Dn 8,10.24s, de Antíoco Epífanes) (4a). Carácter demoníaco del poder, hasta ahora divinizado.

Desproporción entre la fuerza del mal y la de la mujer. El poder no tolera la existencia del hombre nuevo (para devorar) (4b). Hijo varón, fuerza. La comunidad va realizando en la historia el designio de Dios sobre el hombre y consigue hacerlo a pesar de las fuerzas hostiles. Aunque históricamente débil, no será destruida; por el contrario, vencerá y dominará a sus adversarios (destinado a regir, etc., Sal 2,9; cf. Ap 2,25s, donde se dice a todo cristiano "que salga vencedor"); fracaso de la tentativa de eliminar al hombre nuevo, que, participando de la libertad y señorío de Dios (hasta Dios y su trono), queda fuera de su alcance (5). La comunidad como realidad terrestre sigue perseguida; en el desierto (6), fuera de los valores de la sociedad (situación de éxodo respecto a la sociedad opresora), encuentra refugio y protección divina. 1260 días, tres años y medio (cf. 11,2s), el tiempo de la profecía y de la persecución de los dos testigos, figuras de la comunidad (11,3).

12,10.  Aclamación: El reinado de Dios y del Mesías en lugar de la tiranía del dragón (10a). El poder y sus agentes acusaban de impiedad a los cristianos por negarse a practicar el culto imperial (cf. Job 1-2; Zac 3,1s); según ellos, acatar el poder equivalía a acatar a Dios (10b)

SALMO. 45,10-12.16

10 Hijas de reyes vienen a tu encuentro,
de pie a tu derecha está la reina
enjoyada con oro de Ofir.
11 -Escucha, hija, mira, presta oído:
olvida tu pueblo y la casa paterna:
12 prendado está el rey de tu belleza;
ríndele homenaje, que él es tu señor.

16 las llevan con alegría y algazara,
van entrando en el palacio real.


Explicación.

45,9-16. La fiesta tiene más movimiento. Sólo que el poeta no da direcciones escénicas, se las deja a la imaginación del lector. Creo distinguir tres escenas. En la primera vemos al rey, asistido por la reina madre, ambos ricamente ataviados; suena música en el salón de la corte; acuden princesas pretendientes. En la segunda alguien, un funcionario real pide el consentimiento a la princesa elegida (cfr. 1 Sm 25,40s). En la tercera la novia y su séquito son conducidos hacia el salón interior.

 45,10 ¡A tu encuentro!: corrigiendo el texto. Otras lecturas: preciosas, con alhajas, en tus muros, bajo tu techo. La "reina" madre, según lo explicado.

 45,11 Se invierten los papeles de Gn 2,24, donde se dice del varón que abandona a sus padres. Aquí le toca a ella.

45,12 En una época en que muchas bodas reales, dentro de la poligamia, eran actos de política internacional, es notable oír que el rey está enamorado. También la novia tiene que reconocer al rey como señor y rendirle homenaje.

45,15-16 El séquito de muchachas no es conducido directamente al rey, sino al "palacio real". ¿Son damas que servirán a la nueva consorte? ¿Son jóvenes destinadas al harén real? El poeta sorprende su alegría.

TRANSPOSICIÓN CRISTIANA.

Heb 1,8s cita los versos 7-8. Toda la tradición ha leído este salmo como mesiánico; incluso en sentido literal; la liturgia lo escoge para las fiestas del Señor. Meditado en clave cristiana adquiere valor cristológico, Jesucristo rey, y eclesiológico, la iglesia esposa.

SEGUNDA LECTURA. I Corintios 15,20-27.

20Pero de hecho el Mesías ha resucitado de la muerte, como primer fruto de los que duermen, 21pues, si un hombre trajo la muerte, también un hombre trajo la resurrección de los muertos; 22es decir, lo mismo que por Adán todos mueren, así también por el Mesías todos recibirán la vida, 23aunque cada uno en su propio turno: como primer fruto, el Mesías; después, los del Mesías, el día de su venida; 24luego el fin, cuando entregue el reinado a Dios Padre, cuando haya aniquilado toda soberanía, autoridad y poder. 25Porque su reinado tiene que durar hasta que ponga a todos sus enemigos bajo sus pies; 26como último enemigo aniquilará a la muerte: 27pues "todo lo han sometido bajo sus pies" (Sal 8,7) (aunque cuando diga: "Todo le está sometido", se exceptuará evidentemente el que le sometió el universo).

Explicación.

Reafirma Pablo la resurrección del Mesías/Salvador, que así puede salvar también de la muerte (20). Desarrolla Pablo la visión teológica de la doble solidaridad del género humano (cf. Rom 5,12ss); solidaridad para la muerte con el primer Adán, el que fue hecho de la tierra (cf. 15,47), y solidaridad para la vida con el Mesías Jesús, el que procede del cielo por el Espíritu que recibió (20-22). Pablo parece muy dependiente de la escatología farisea, que colocaba la resurrección al fin de los tiempos (cf. Jn 11,23-27) (23). El fin (24) era término técnico para designar el reino mesiánico; Pablo lo traslada al reino definitivo. La obra del Mesías en la historia consistirá precisamente en ir venciendo a todos los enemigos del hombre (Sal 110,1; 8,7); el último será la muerte (25-27).

EVANGELIO. Lucas 1,39-56.

39 Por aquellos días María se puso en camino y fue a toda prisa a la sierra, a un pueblo de Judá;
40 entró en casa de Zacarías y saludó a Isabel.
41 Al oír Isabel el saludo de María, la criatura dio un salto en su vientre e Isabel se llenó de Espíritu Santo.
42 Y dijo a voz en grito:
-¡Bendita tú entre las mujeres y bendito el fruto de tu vientre!
43 Y ¿quién soy yo para que me visite la madre de mi Señor?
44 Mira, en cuanto tu saludo llegó a mis oídos, la criatura saltó de alegría en mi vientre.
45 ¡Y dichosa tú por haber creído que llegará a cumplirse lo que te han dicho por parte del Señor!
46 Entonces dijo María:
-Proclama mi alma la grandeza del Señor
47 y se alegra mi espíritu en Dios mi Salvador,
48 porque se ha fijado en la humillación de su sierva.
Pues mira, desde ahora me llamarán dichosa todas las generaciones,
49 porque el Potente ha hecho grandes cosas en mi
favor: Santo es su nombre
50 y su misericordia llega a sus fieles
de generación en generación.

51 Su brazo ha intervenido con fuerza,
ha desbaratado los planes de los arrogantes:
52 derriba del trono a los poderosos
y encumbra a los humildes;
53 a los hambrientos los colma de bienes
y a los ricos los despide de vacío.

54 Ha auxiliado a Israel, su servidor,
acordándose, como lo había prometido a nuestros padres,
55 de la misericordia en favor de Abrahán y su descendencia,
por siempre.56 María se quedó con ella cuatro meses y se volvió a su casa.


EXPLICACIÓN.

Prontitud para el servicio (39): el Israel fiel (María), que vive fuera el influjo de la capital (Nazaret de Galilea), va en ayuda del judaísmo oficial (Isabel; Judá, nombre de la tribu en cuyo territorio estaba Jerusalén). El saludo de María comunica el Espíritu a Isabel y al niño (44). Isabel habla como profetisa (41s). La bendición, por la maternidad de María. El fruto del vientre (42: cf. Dt 7,13; 28,4). Por haber creído (45), a diferencia de Zacarías.

Por boca de María pronuncia su cántico el Israel fiel a Dios y a su alianza (46-48), el que ha creído en las promesas. Alaba a Dios por su cumplimiento, que ve inminente por el hecho de la concepción del Mesías. Dios mi salvador (47; cf. Sal 24,1; 25,5; Miq 7,7, etc), título clave del cántico, cuyo tema va a ser la salvación que Dios realiza en Israel; la humillación (48): en el AT, estado de opresión de que Dios libra a su pueblo (Dt 26,7; Sal 136,23; Neh 9,9); grandes cosas (49): se decía en particular de la salida de Egipto (Dt 10,21) y de la liberación de Babilonia (Jr 33,3, segundo éxodo); sus fieles (50), representados por María, "la sierva" (Éx 20,6).

Ha intervenido (51: aoristo profético): Se ve el futuro como realización efectuada e infalible de una decisión divina ya tomada. Se explica la salvación que Dios va a realizar. Su brazo (Éx 6,6; Dt 4,34); los arrogantes (cf. Is 13,11), explicitados a continuación como los poderosos y los ricos (52s). La acción liberadora va a consistir en una subversión del orden social: exaltación de los humildes (1 Sm 2,5.7s; 2 Sm 22,28; Sal 72,1-4.12s; 75,5; 107,9.40s; 147,6; Eclo 10,14, etc), caída de los opresores (cf. 6,21; 11,13; Job 15,29; Jr 17,11). Destinatario de la salvación: Israel su servidor (54) (Is 41,8s; 42,1; 44,1.2.21; 45,4) = "sus fieles" (50) = "su sierva" (48). Dios no ha olvidado su misericordia/amor (Sal 98,3), como podía haber sospechado Israel ante los numerosos desastres históricos que ha sufrido. Amor prometido a los padres/patriarcas (55) (Gn 12,2ss; 15,4sss; 17,7; 22,17); fidelidad de Dios (54s). Lc menciona por adelantado la vuelta de María (56).

DOMINGO 14 DE AGOSTO DEL 2022

 PRIMERA LECTURA. Jeremías 38,4-6.8-10.

4Y los dignatarios dijeron al rey:
-Muera ese hombre, porque está desmoralizando a los soldados que quedan en la ciudad y a todo el pueblo con semejantes discursos. Ese hombre no busca el bien del pueblo, sino su desgracia.
5Respondió el rey Sedecías:
-Ahí lo tenéis, en vuestro poder: el rey no puede nada contra vosotros.
6Ellos prendieron a Jeremías y lo arrojaron en el aljibe de Malaquías, príncipe real, en el patio de la guardia, descolgándolo con sogas. En el aljibe no había agua, sino lodo, y Jeremías se hundió en el lodo.
8Ebedmélec salió de palacio y habló al rey:
9-Majestad, esos hombres han tratado inicuamente al profeta Jeremías, arrojándolo al aljibe, donde morirá de hambre (porque no quedaba pan en la ciudad).
10Entonces el rey ordenó a Ebedmélec, el nubio:
-Toma tres hombres a tu mando y sacad al profeta Jeremías del aljibe antes de que muera.

Explicación.

38,3-4 El planteamiento de los dignatarios es tan radical como el del profeta: se juega el bienestar o la desgracia del pueblo. Por el bien de todo el pueblo, hay que eliminar a uno (cfr. Jn 11,50; 18,14). ¿A quién toca definir lo que ahora es el bien del pueblo?

38,5 El rey comprende que, tengan o no razón, tienen más poder; incluso que el rey. ¿No es por culpa de Sedecías?. ¿podemos decir que tienen más culpa los ministros?

38,6 Equivale a una condena a muerte lenta: oscuridad, hambre, soledad (cfr. Sal 40,3 y 69,3.15). En este momento ¿está el Señor con Jeremías, como le había prometido (1,8)?, ¿no le "han podido" sus enemigos?

38,9 Son palabras valientes, porque el empleado está acusando a personajes influyentes en la política. Plantea el asunto puramente en términos de justicia. El rey encuentra en el extranjero un ejemplo y apoyo a su debilidad.

38,10 Y por medio del sentido de justicia y el valor de un extranjero, el Señor cumple su promesa a su profeta. Con todo, la liberación es parcial, porque Sedecías no se atreve a romper sus ataduras.

SALMO.  40,2-4.18.

2 Yo esperaba con ansia al Señor:
se inclinó a mí y escuchó mi grito.
3 Me levantó de la fosa fatal,
de la charca fangosa.
Afianzó mis pies sobre una peña,
y aseguró mis pasos.
4 Me puso en la boca un canto nuevo
de alabanza a nuestro Dios.
Muchos al verlo quedaron sobrecogidos
y confiaron en el Señor.
 18 Yo soy un pobre desgraciado,
pero el Señor se cuida de mí.
Tú eres mi auxilio y mi salvador,
¡Dios mío, no tardes!

Explicación.

40,2 La forma enfática traduce la expectación, casi la impaciencia del aguardar.

40,3 El lenguaje nos trae la figura de Jeremías en el aljibe fangoso: Jr 38,6.13.

40,4 "Poner en la boca" es fórmula de alcance profético: Dt 18,18; Jr 1,9; 5,14.

40,18 En el último verso retorna el orante con un enfático "yo". Se cierra el cuadrilátero: Tú -los malvados- tus fieles- yo.

TRANSPOSICIÓN CRISTIANA.

La carta a los Hebreos recoge y comenta la parte central del salmo, según la versión griega de los LXX. En vez de "me cavaste oídos", dice "me aparejaste un cuerpo"; traduce "rollo" por "título". De este modo opone el autor a los sacrificios antiguos la entrega del Mesías. De aquí arranca el uso de los antiguos de poner todo el salmo en boca de Cristo y después en boca de la Iglesia.  

SEGUNDA LECTURA. Hebreos 12,1-4.

   1En consecuencia, rodeados como estamos por tal nube de testigos de la fe, sacudámonos todo lastre y el pecado que se nos pega. Corramos con constancia en la competición que se nos presenta, 2fijos los ojos en el pionero y consumador de la fe, Jesús; el cual, por la dicha que le esperaba, sobrellevó la cruz, despreciando la ignominia, y está sentado a la derecha del trono de Dios. 3Meditad, pues, en el que soportó tanta oposición de parte de los pecadores, y no os canséis ni perdáis el ánimo.
                     4Aún no habéis resistido hasta la sangre en vuestra lucha contra el pecado; 

Explicación.
  
Exhortación que invoca el ejemplo de los personajes citados y, sobre todo, el del Mesías Jesús, constante hasta la muerte (1-3). El autor apela a un texto sapiencial hebreo (Prov 3,11s LXX) para mostrar la necesidad de ser educados por Dios; él educa en la adversidad (4-8).

EVANGELIO. Lucas 12,49-53.

49 Fuego he venido a lanzar a la tierra, y ¡qué más quiero si ya ha prendido!
50 Pero tengo que ser sumergido por las aguas y no veo la hora de que eso se cumpla.
51 ¿Pensáis que he venido a traer paz a la tierra? Os digo que paz no, sino división.
52 Porque, de ahora en adelante, una familia de cinco estará dividida: tres contra dos y dos contra tres;
53 se dividirá padre contra hijo e hijo contra padre, madre contra hija, e hija contra madre, la suegra contra su nuera y la nuera contra la suegra.

EXPLICACIÓN.

Colofón de la primera secuencia. Jesús trae fuego a la tierra, pero no un fuego destructor ni de juicio (contra la expectación de Juan Bautista, cf. 3,9.16.17); fuego es el mismo Espíritu (cf. Hch 2,3), fuerza de vida que él infunde en la historia y que causa división entre los hombres (49). Reacción de la sociedad; darle muerte (ser sumergido por las aguas); él desea llevar a término su obra con la plena efusión del Espíritu, que será fruto de su muerte (23,46) (50). El juicio lo hace la actividad misma que la persona adopte ante el mensaje. Se rompe así la falsa paz del orden establecido (cf. Miq 7,6). Los vínculos que crea la adhesión a Jesús son más fuertes que los de sangre (cf. 8,19-21) (51-53).

LECTURAS DEL JUEVES 9 DE MAYO DEL 2024

  PRIMERA LECTURA. Hechos 18,1-8. HECHOS DE LOS APÓSTOLES. ÍNDICE. 1 Después de aquello, abandonó Atenas y fue a Corinto.   2 Encontró a cie...