lunes, 23 de octubre de 2023

JUEVES 30 DE NOVIEMBRE DEL 2023

PRIMERA LECTURA. Romanos 10,9-18.

CARTA A LOS ROMANOS.

9Porque si tus labios profesan que Jesús es Señor y crees de corazón que Dios lo resucitó de la muerte, te salvarás. 10La fe interior obtiene la rehabilitación y la profesión pública obtiene la salvación, 11pues dice la Escritura: "Ninguno que crea en él quedará defraudado" (Is 28,16). 12Y ya no hay distinción entre judío y griego, porque uno mismo es el Señor de todos, generoso con todos lo que lo invocan; 13porque "todo el que invoca el nombre del Señor se salvará" (Jl 3,5).
             14Pero, ¿cómo van a invocarlo sin creer en él?, y ¿cómo van a creer sin oír hablar de él?, y ¿cómo van a oír sin uno que lo anuncie? 15y ¿cómo lo van a anunciar sin ser enviados? Según aquello de la Escritura: "Bienvenidos los que traen buenas noticias" (Is 52,7).
16 Sin embargo, no todos han respondido a la buena noticia. Mirad lo que dice Isaías: "Señor, ¿quién ha dado fe a nuestro mensaje?" (Is 53,1). 17¿Lo ves? La fe sigue al mensaje, y el mensaje es el anuncio del Mesías. 18Pero pregunto yo: ¿Será que no han oído hablar? Todo lo contrario, "a toda la tierra alcanzó su pregón y hasta los límites del orbe su lenguaje" (Sal 19,5). 

EXPLICACIÓN.

La nueva palabra es la profesión de fe, que nace del corazón (Dt 30,12-14). La fe, que es entrega a Dios en la adhesión a Jesús Mesías, obtiene la rehabilitación. La profesión pública, que es una ruptura con el pasado y un compromiso de acción, obtiene vida (Espíritu) y salvación (Is 28,16; Jl 3,5) (10-13). Jesús, a diferencia de Moisés, no ha dejado libros. Es la palabra viva de la predicación la que transmite su mensaje (Is 52,7) (14-15).  

Los israelitas no sólo tenían los textos del Deuteronomio, sino que la apertura a los paganos se les había declarado explícitamente por medio de los profetas (Is 53,1), y la habían rechazado. Proclamación universal (Sal 19,5). Pablo describe los hechos de su tiempo usando testimonios proféticos. 

SALMO. 19,8-11.
8 La ley del Señor es perfecta:
devuelve el respiro;
el precepto del Señor es fiable:
instruye al ignorante;
9 los mandatos del Señor son rectos:
alegran el corazón;
la norma del Señor es límpida:
da luz a los ojos;
10 el respeto del Señor es puro:
dura para siempre;
los mandamientos del Señor son genuinos;
justos sin excepción;
11 son más valiosos que el oro,
que el metal más fino;
son más dulces que la miel 
que destila un panal.

Explicación.

19 Algunos niegan la unidad del salmo, por el cambio de tema, de estilo, de nombre divino. Otros lo reparten en un par de etapas de composición. Las razones pesan poco y la división empobrece el sentido. El género hímnico admite y unifica materiales diversos, p. ej. Sal 136 o 147. Defendiendo la unidad lo explicaré en cuatro secciones.

LECTURA UNITARIA. El cielo revela al hombre el orden y la alabanza: el orden como hecho ontológico. La alabanza como interpretación de lenguaje. La creación interpela al hombre invitándolo a la alabanza y la obediencia. El hombre podría abrirse al lenguaje de la creación y elevar la voz como liturgo del cosmos. Pero falla, y entonces Dios hace palabra su voluntad para ordenar al hombre. Vista así, la ley es razonable y deseable, valiosa y sabrosa; el hombre se siente atraído por ella y canta su alabanza. Pero vuelve a fallar, y su fallo es más grave. Es que la ley manda sin dar fuerzas, divide al hombre, le revela su impotencia. El hombre descubre su limitación radical y un poder que lo avasalla. Sentida dolorosamente su incapacidad, el hombre se vuelve a Dios pidiendo auxilio; y así la ley, mediatamente, encamina al hombre a su liberación. Dios solo puede devolver al hombre inocencia e integridad. Entonces el hombre puede entonar la alabanza, dando lenguaje formal al discurso inarticulado de los cielos, y esperando que Dios la acepte.

19,8-11 Tercera sección. Sin transición ni introducción entre un tema nuevo. Entra la ley abriendo paso a seis sentencias de una regularidad exasperante, como materializando en lenguaje el orden que intenta establecer. Sólo sies: falta una para la perfección.
Los predicados son en gran parte corpóreos: respiración, corazón, ojos; es límpida y pura, es estable y ofrece apoyo. Es razonable, no teme dar razones y así educa al inexperto sin dejarlo en su ignorancia. Es lúcida, no exige obediencia ciega, sino que ilumina los ojos. Da alegría interna, no es carga insoportable.
El último verso propone dos coparaciones: oro, símbolo y medida de valor; miel, manjar el más sabroso (Prov 16,24). El autor piensa en el contenido más que en la formalidad de la ley.

TRANSPOSICIÓN CRISTIANA.

Rom 10,18 aplica el v.4 a la predicación del evangelio. El cristiano contempla la creación restaurada en Cristo. Los antiguos explotaron el símbolo del sol como esposo; su salida del tálamo de María en el nacimiento, su carrera "desde el Padre hasta el Padre"; su calor es el Espíritu. La reflexión sobre ley y gracia anticipa la enseñanza de Pablo.  

EVANGELIO. Mateo 4,18-22.
      18 Caminando junto al mar de Galilea, vio a dos hermanos: a Simón, el llamado Pedro, y a Andrés, su hermano, que estaban echando una red de mano en el mar, pues eran pescadores.
19 Les dijo:
                  - Veníos conmigo y os haré pescadores de hombres.
                 20 Inmediatamente dejaron las redes y lo siguieron.
                 21 Pasando adelante vio a otros dos hermanos: a Santiago y a Juan, hijos de Zebedeo, que estaban en la barca poniendo a punto las redes, con Zebedeo, su padre. Jesús los llamó.
                22 Inmediatamente dejaron la barca y a su padre y lo siguieron.

EXPLICACIÓN.

18 - 22.      Esta llamada es el paradigma de todas las demás en Mt. El mar/lago, frontera con los pueblos paganos y alusión al éxodo. La insistencia en el vínculo de hermandad (18.21) alude a Ez 47,13s, donde se anuncia el futuro reparto de la tierra a partes iguales ("cada uno como su hermano"): igualdad de todos sus seguidores. La invitación de Jesús (19) recuerda la llamada de Eliseo por parte de Elías (1 Re 19,19-21). Lo presenta como profeta e implica la comunicación de su Espíritu. Pescadores de hombres, cf. Ez 47,10. Jesús llama a una misión que pretenderá atraer a los hombres (judíos y paganos). Santiago y Juan, hermanos; presencia del padre, figura de la autoridad y de la tradición (21). En lo sucesivo no deberán reconocer más que al Padre del cielo (6,9; 23,9) (21-22).

MIÉRCOLES 29 DE NOVIEMBRE DEL 2023

PRIMERA LECTURA. Eclesiástico 44,1.10-15.

ECLESIÁSTICO.

La historia

44 1Voy a hacer el elogio de los hombres de bien, 
de la serie de nuestros antepasados: 
10No así los hombres de bien: 
su esperanza no se acabó, 
11 sus bienes perduran en su descendencia, 
su heredad pasa de hijos a nietos. 
12Sus hijos siguen fieles a la alianza,
y también sus nietos, gracias a ellos. 
13Su recuerdo dura por siempre,
su caridad no se olvidará. 
14SepuItados sus cuerpos en paz,
vive su fama por generaciones;
15el pueblo cuenta su sabiduría,
la asamblea pregona su alabanza. 

Explicación.

44,1 El término "de bien" es el clásico hsd: hombres que han recibido de Dios la bondad o misericordia, y la ejercitan con los demás. Lo cual significa ya una selección en la mente del autor: bienhechores. Además los considera en su categoría de "antepasados", con fuerte expresión de continuidad y pertenencia: casi tradición biológica.  

44,10-15 Repite la fórmula del verso primero. La continuidad de las generaciones y la del recuerdo forman la tradición de Israel. El recuerdo hace presentes y actuales los antepasados, como los descendientes hacen presente una estirpe. El recuerdo está ligado a la caridad, según la convicción del autor, Eclo 40,17; Sal 112: es la práctica de la "misericordia" que encabeza el fragmento. Pero el hombre no sobrevive, sólo perdura su fama: compárese con Eclo 39,9-11. 

SALMO. 24,1-6.
Sal 15; Is 33,14-16.

1 Del Señor es la tierra y cuanto la llena,
el orbe con sus habitantes,
2 pues él la fundó sobre las mares,
sobre las corrientes la afianzó.
3 -¿Quién puede subir al monte del Señor?,
¿´quién podrá estar en el reino sacro?
4 -El de manos inocentes y puro corazón,
el que no acude a los ídolos
ni jura en falso.
5 Ése recibirá del Señor la bendición
y la justicia de Dios su Salvador.
6 -Ése es el grupo que lo busca;
que viene a visitarte, Dios de Jacob.

Explicación.

24. Se suele considerar este salmo como liturgia de entrada en el templo, y hace compañía al 15. Se reconstruye o conjetura una acción litúrgica en la que encajan los datos del salmo: introducción hímnica, doble diálogo, presentación del grupo, entrada del Señor.

El acto litúrgico se imagina a la luz de textos narrativos: 2 Sm 6,13-15; Éx 40,21.34; 43,4. Divergen los autores al asignarle la ocasión litúrgica: en la fundación o conmemoración del traslado del arca (2 Sm 6): canto de victoria; fiesta de la renovación de la alianza; fiesta de la entronización de Ywhw. Es decir, el salmo se presta a varias lecturas, a varios empleos.

La composición es muy regular e invita a observar correspondencias y distinciones. De un escenario universal (1-2) se salta a la concentración extrema en el templo: cfr. 1 Re 8,27. Se corresponden: tierra / habitantes = templo / visitantes. Al templo llegan al parecer juntos, un grupo de fieles (3-6) y el Señor Glorioso (7-10). Para los fieles pregunta, para Ywhw imperativos; los fieles con condiciones, Ywhw sin condiciones; identificados los fieles en su búsqueda diligente, Ywhw en su nombre y título.

24,1-2 Toma la imagen de fundadores y constructores de ciudades (Gn 4,17; Jos 6,26; 1 Re 16,34), y la atribuye a Dios, fundador de la tierra: Sal 78,69; 89,12; 102,26; Job 38,4-7. Los hombres asientan sobre roca o terreno firme; Dios cimienta la tierra sobre el movedizo e inestable océano. Por debajo de los continentes discurren corrientes que afloran en los manantiales.

24,2 Job 38,4-7.

24,3 El "recinto" o lugar santo supone previa elección y consagración: frecuente en Deuteronomio.

24,4-6 Juntan cualidades éticas con buscar a Dios, sin definir exactamente la relación.

24,4 Manos y corazón son un merismo que incluye toda clase de acciones, pensamientos y deseos. Siguen dos preceptos del decálogo. "Acudir": la expresión hebrea parece significar una tendencia intensa hacia algo: cfr. Dt 24,25; Prov 19,18.

24,5 Aunque mencione al patriarca Jacob creo que se refiere a las bendiciones condicionadas de la alianza. La "justicia" es la que consiste en la observancia, según Dt 6,25.

24,6 No se trata de una procesión formalista, realmente vienen buscando a Dios, en el templo.

TRANSPOSICIÓN CRISTIANA.

1 Cor 10,26, cita el primer verso del salmo para justificar la libertad cristiana. La tradición antigua y la liturgia aplican el salmo a la ascensión de Jesucristo; algunos autores componen con la fantasía una escena celeste, con diálogo de ángeles. El cortejo se identifica con la comunidad cristiana.  

EVANGELIO. Marcos 10,17-21.

El hombre rico (Mt 19,16-22; Lc 18,18-23)  

17Mientras salía de camino se le acercó uno corriendo y, arrodillándose ante él, le preguntó:
-Maestro insigne, ¿qué tengo que hacer para heredar vida definitiva?
18Jesús le contestó:
-¿Por qué me llamas insigne? Insigne como Dios, ninguno. 19Ya sabes los mandamientos: no mates, no cometas adulterio, no robes, no des  falso testimonio, no defraudes, sustenta a tu padre y a tu madre.
20ÉI le declaró:
-Maestro, todo eso lo he cumplido desde joven: 
21Jesús se le quedó mirando y le mostró su amor diciéndole:
-Una cosa te falta: ve a vender todo lo que tienes y dáselo a los pobres, que tendrás en Dios tu riqueza; y anda, ven y sígueme. 
 Explicación.
(10,17-21): La riqueza, obstáculo para seguir a Jesús. Un hombre angustiado busca solución para el problema crucial: superar la muerte. Reconoce en Jesús un saber superior (Maestro insigne)(17). En este asunto, los judíos han tenido al mejor de los maestros, Dios (18). Condición mínima para obtener vida definitiva: no ser personalmente injusto. De los diez mandamientos, Jesús omite los tres primeros, cita solamente los éticos, los que se refieren al prójimo. Mc añade no defraudes, no privar a otro de lo que se le debe. Invierte el orden (el cuarto, al final): la obligación para con la familia no exime de la obligación para con la humanidad (19). Fidelidad de aquel hombre (20). Le demostró su amor invitándolo a incorporarse al grupo de discípulos; una cosa te falta: acoger el reinado de Dios como un chiquillo (10,15), abandonando la riqueza (8,34: «reniegue de sí mismo») para hacerse último y servidor de todos (9,35). Aunque personalmente no es injusto, está implicado, por su riqueza, en la injusticia de la sociedad. Para construir el reino de Dios (la sociedad nueva) no basta ser justo personalmente, hay que eliminar la base de la injusticia, la desigualdad y la dependencia creadas por la acumulación de riqueza. Dar a los pobres, sin esperanza de recuperarlo; tendrás en Dios tu riqueza (lit. «tendrás un tesoro en el cielo») se refiere a 1 O, 14: «tienen a Dios por rey»: renunciando a la seguridad del capital se obtiene la que procura el cuidado de Dios por los suyos.

MARTES 28 DE NOVIEMBRE DEL 2023

 PRIMERA LECTURA. Daniel 2,31-45.

DANIEL.

31»Tú, rey, viste una visión: una estatua majestuosa, una estatua gigantesca y de un brillo extraordinario; su aspecto era impresionante.
32Tenía la cabeza de oro fino. el pecho y los brazos de plata. el vientre y los muslos de bronce. 33Las piernas de hierro y los pies de hierro mezclado con barro. 34En tu visión una piedra se desprendió sin intervención humana, chocó con los pies de hierro y barro de la estatua y la hizo pedazos. 35Del golpe se hicieron pedazos el hierro y el barro, el bronce, la plata y el oro, triturados como tamo de una era en verano, que el viento arrebata y desaparece sin dejar rastro. Y la piedra que deshizo la estatua creció hasta convertirse en una montaña enorme que ocupaba toda la tierra.
36»Éste era el sueño; ahora explicaremos al rey su sentido: 37Tú. Majestad, rey de reyes, a quien el Dios del cielo ha concedido el reino y el poder, el dominio y la gloria, a quien ha dado poder 38sobre los hombres dondequiera que vivan, sobre las fieras agrestes y las aves del cielo, para que reines sobre ellos, tú eres la cabeza de oro. Te sucederá un reino de plata, menos poderoso. 39Después un tercer reino, de bronce, que dominará todo el orbe. 40Vendrá después un cuarto reino, fuerte como el hierro. Como el hierro destroza y machaca todo, así destrozará y triturará a todos.
41»Los pies y los dedos que viste, de hierro mezclado con barro de alfarero, representan un reino dividido; conservará algo del vigor del hierro, porque viste hierro mezclado con arcilla. 42Los dedos de los pies. de hierro y barro, son un reino a la vez poderoso y débil. 43Como viste el hierro mezclado con la arcilla, así se mezclarán los linajes, pero no llegarán a fundirse, lo mismo que no se puede alear el hierro con el barro. 44Durante esos reinados, el Dios del cielo suscitará un reino que nunca será destruido ni su dominio pasará a otro, sino que destruirá y acabará con todos los demás reinos, pero él durará por siempre; 45eso significa la piedra que viste desprendida del monte sin intervención humana y que destrozó, el barro, el hierro, el bronce, la plata y el oro. Este es el destino que el Dios poderoso comunica a su majestad. El sueño tiene sentido, la interpretación es cierta». 

Explicación.

2,31-35 La brevedad y lucidez de la descripción convencen al rey y también, artísticamente, al lector la grandeza colosal, el brillo deslumbrante, la caída súbita, el escenario barrido por el viento y llenándose con la montaña suceden en pocas frases certeras. La visión es grandiosa con sobriedad. Reina el silencio, quebrado por el choque final. 

2,35 "Como el tamo": Sal 1,4; 18,43. 

2,37-38 Inspirado en Jr 27.6 y 28.14; mediatamente depende de Gn 1.28 y Sal 8; reaparece en Bar 3.16. 

2,41-43 La amplificación algo torpe desentona en el resto; quizá sea adición de un comentarista. Hay que retener la mezcla de poder y debilidad. 

2,44 El material del nuevo reino es sólida piedra o roca; la montaña representa lo estable y duradero (Gn 49.26; Hab 3.6). 

2,45 En el contexto del autor la piedra es el pueblo elegido; la lectura mesiánica se impuso más tarde. 

SALMO. Daniel 3,57-61.
57Criaturas todas del Señor, bendecid al Señor, 
ensalzadlo con himnos por los siglos. 
58Ángeles del Señor, bendecid al Señor, 
ensalzadlo con himnos por Los siglos. 
59 Cielos, bendecid al Señor,
ensalzadlo con himnos por Los siglos.
60Aguas del espacio, bendecid al Señor,
ensalzadlo con himnos por los siglos.
61Ejércitos del Señor, bendecid al Señor,
ensalzadlo con himnos por los siglos. 

Explicación.

3,51-90 El autor griego inserta un himno inspirado en el Sal 136 por el artificio letánico y en el 148 por la invitación universal. Quizá existió como himno autónomo. En el presente contexto se carga de nuevo sentido.

Dura era un escenario universal de los súbditos del Emperador; los cantores en el horno se abren a un escenario cósmico. La banda del rey, música instrumental, convocaba a jefes y súbditos al homenaje de la estatua; la voz humana de los jóvenes convoca el universo al elogio unísono de Dios. En vez de holocaustos de aroma que aplaca, brota ahora el "sacrificio de los labios", la ofrenda musical de la alabanza. Dios no acepta por ahora el sacrificio de la vida de sus fieles, se contenta con el sacrificio del testimonio heroico y de la alabanza entusiasta. 

La serie se divide cómodamente en: seis invocaciones dirigidas a Dios, una invitación universal y seis celestes, diez a los meteoros, ocho a animales y siete a hombres. Tiene menos rigor y concentración que el Sal 148. Toda la creación se une al coro de alabanza cuando la convoca la palabra humana. De este modo el hombre ejercita su señorío sobre la creación, nombrándola de nuevo (cfr. Gn 1) Y dándole órdenes desinteresadas. Así se la somete para someterla a Dios, cerrando el círculo que comenzó en la creación. 
  
3,59 El océano celeste, por encima del firmamento (Sal 29,10). 

3,61 Astros y constelaciones al servicio de Dios.

EVANGELIO. Lucas 21,5-11.
5 Como algunos hablaban del templo, ponderando la calidad de la piedra y el adorno de los exvotos, dijo:
6 - Eso que contempláis llegará un día en que no dejarán piedra sobre piedra que no derriben.

LA GUERRA NO ANUNCIA EL FIN. PERSECUCIONES.

7 Entonces le hicieron esta pregunta:
- Maestro, ¿cuándo va a ocurrir eso? y ¿cuál será la señal, cuando eso esté para suceder?
8 Él respondió:
- Cuidado con dejarse extraviar, porque van a llegar muchos diciendo en nombre mío: "Yo soy" y "El momento está cerca"; no os vayáis tras ellos.
9 Cuando oigáis estruendo de batallas y subversiones, no tengáis pánico, porque eso tiene que suceder primero, pero el fin no será inmediato.
10 Entonces dijo a los discípulos:
- Se alzará nación contra nación y reino contra reino, 
11 habrá grandes terremotos y, en diversos lugares, hambre y epidemias; habrá fenómenos terribles y señales grandes en el cielo.

Explicación.

En Lc, la predicción de Jesús y su discurso sobre el futuro de Jerusalén y del templo y sobre el reinado de Dios en la historia se pronuncian dentro del templo y se dirigen a los que escuchaban su enseñanza (cf. Mt 24; Mc 13).

(5s) A la admiración por la belleza del templo responde Jesús con la predicción de su ruina (cf. 19,41-44: lamento sobre Jerusalén).

(7) La pregunta siguiente no manifiesta sorpresa; de hecho, se pensaba que estaba próximo el cumplimiento de la profecía de las setenta semanas (Dn 9,24-27), y que el momento de máxima ruina señalaría el comienzo de la restauración de Israel y la derrota de los paganos (Dn 7,27). La pregunta es doble: quieren saber el momento en que tendrá lugar el desastre y, en segundo lugar, cuál será la señal que anuncie la inversión del curso de los acontecimientos y la restauración.

(8-19) Comienza el discurso previniendo contra un engaño: el desastre no anuncia una restauración: el presupuesto de la pregunta es falso. De hecho, dentro del grupo judeocreyente muchos simularán espíritu de profecía: atribuirán a Jesús el papel de restaurador de Israel (Yo soy: el Mesías nacionalista) y anunciarán la inminencia de su intervención (el momento está cerca) (8).

Sin embargo, los acontecimientos guerreros no anunciarán el fin de la opresión ni la inmediata restauración mesiánica (9). Habrá guerra y desastres (10s). Pero, lo mismo que el rechazo de "el Hombre" había de proceder a la destrucción de Jerusalén, también los discípulos serán perseguidos de parte de los poderes judíos y paganos. Esto los confirmará en la verdad de su postura (cf. 6,22) (12s).

LUNES 27 DE NOVIEMBRE DEL 2023

2 OPCIONES.

1ª OPCIÓN.

PRIMERA LECTURA. Daniel 1,1-6.8-20.
Daniel en la corte de Babilonia.

1El año tercero del reinado de Joaquín, rey de Judá, llegó a Jerusalén Nabucodonosor, rey de Babilonia, y la asedió. 2EI Señor entregó en su poder a Joaquín de Judá y todo el ajuar que quedaba en el templo; se los llevó a Senaar, y el ajuar del templo lo metió en el tesoro del templo de su dios.
3EI rey ordenó a Aspenaz, jefe de eunucos, seleccionar algunos israelitas de sangre real y de la nobleza, 4jóvenes, perfectamente sanos, de buen tipo, bien formados en la sabiduría, cultos e inteligentes y aptos para servir en palacio, y ordenó que les enseñasen la lengua y literatura caldeas. 5Cada día el rey les pasaría una ración de comida y de vino de la mesa real. Su educación duraría tres años, al cabo de los cuales pasarían a servir al rey.
6Entre ellos había unos judíos: Daniel, Ananías, Misael y Azarías. 
8Daniel hizo propósito de no contaminarse con los manjares y el vino de la mesa real, y pidió al jefe de eunucos que le dispensase de esa contaminación. 9EI jefe de eunucos, movido por Dios, se compadeció de Daniel y le dijo:
I0-Tengo miedo al rey, mi señor, que os ha asignado la ración de comida y bebida; si os ve más flacos que vuestros compañeros, me juego la cabeza.
11Daniel dijo al guardia que el jefe de eunucos había designado para cuidarle a él, a Ananías, a Misael y a Azarías:
12-Haz una prueba con nosotros durante diez días: que nos den legumbres para comer yagua para beber. 13Compara después nuestro aspecto con el de los jóvenes que comen de la mesa real y trátanos luego según el resultado.
14Aceptó la propuesta e hizo la prueba durante diez días. 15Al acabar tenían mejor aspecto y estaban más gordos que los jóvenes que comían de la mesa real. 16Así que les retiró la ración de comida y de vino y les dio legumbres.
17Dios les concedió a los cuatro un conocimiento profundo de todos los libros del saber. Daniel sabía además interpretar visiones y sueños.
18AI cumplirse el plazo señalado por el rey, el jefe de eunucos se los presentó a Nabucodonosor. 19Después de conversar con ellos, el rey no encontró ninguno como Daniel, Ananías, Misael y Azarías, y los tomó a su servicio.
20 Y en todas las cuestiones y problemas que el rey les proponía, lo hacían diez veces mejor que todos los magos y adivinos de todo el reino. 

Explicación.

1 La penetración y ascenso de un israelita en corte extranjera es trama literario bien establecido desde los relatos sobre José; el libro de Daniel recoge el tema con una estructura paralela marcada.

a) Egipto, Daniel como cautivo de guerra; b) José supera la prueba de la seducción, Daniel la de la dieta; c) José triunfa en la confrontación con la sabiduría local, lo mismo Daniel; d) José ocupa un cargo importante en el reino, y lo mismo Daniel. e) José desde su cargo salva a los padres de Israel, Daniel anuncia la salvación de sus hermanos. 

Subrayemos la diferencia en b): de lo ético universal pasamos a una observancia convencional. La dieta se había convertido en observancia religiosa diferenciadora, signo de identidad, que provocaba extrañeza y desprecio entre los griegos. Muchos judíos hicieron de ella cuestión de ser o no ser fieles a su Dios (2 Mac 6-7); compárese con la conducta de Jeconías (2 Re 25,29). El jefe de eunucos, "movido por Dios", seculariza el asunto, y sucedió lo que el autor pretendía: la dieta judía demuestra su superioridad higiénica, como inspirada por Dios. 

El papel de Daniel es de penetración y confrontación. A los jóvenes judíos seleccionados no se les exige la conversión religiosa. Ellos aceptan sin dificultad: la lengua y literatura (en parte religiosa), el vasallaje genérico y el servicio específico con sus implicaciones; sólo rechazan algunos alimentos. A través de la fábula se presenta la confrontación del judaísmo con el helenismo de Lágidas y Seléucidas. La segunda confrontación se sitúa en el terreno intelectual; en el cual los jóvenes judíos derrotan ampliamente a sus rivales. Todo por la gracia de Dios. 

1,1-2 La fecha indicada es falsa históricamente, teológicamente es significativa: es el comienzo de una era, del poder de imperios y naciones paganas, que durará hasta la muerte de Antíoco Epífanes. La caída de Jerusalén, el incendio del templo y el traslado de su ajuar a Babilonia marcan el traspaso de poderes. Los apocalípticos no consideran la vuelta del destierro como verdadera restauración, porque el pueblo sigue sometido. Ni consideran el edificio de Ageo y Zacarías como el templo consumado. Todo eso es una etapa intermedia, que culminará en una gran profanación y en la plena restauración inminente. 

1,3-4 Su saber está en el orden del consejo y la administración. Tener a nobles por servidores enaltece la gloria de un soberano (Is 10,8 Y 23,8). Él afirma su poder, ellos acceden a la confrontación. De aquí brota la ironía de varios relatos. 

1,8 Sobre tabúes alimenticios: Ez 4,13s; Os 9,3; Est 4,14; Jdt 10,5 etc. 

1,12 Además de evitar manjares prohibidos, practican una dieta ascética. Podía practicarse por penitencia o para alcanzar la inspiración celeste (10,2s); véase el precedente de los recabitas (Jr 35). 

1,15 Lam 4,7. 

1,17 El primero es un saber tradicional, recogido en escritos, que se aprende estudiando y que pueden enseñar los maestros caldeos. Dios lo concede por medios humanos, bendiciendo el trabajo (Eclo 39,5-8). Entender visiones y sueños es don directo de Dios (Eclo 34,1-8). 

1,20 Compárese con la reina extranjera proponiendo enigmas a Salomón (1 Re 10,1-3): los papeles se invierten.

SALMO. Daniel 3,52-56.
52Bendito eres, Señor, Dios de nuestros padres,
a ti gloria y alabanza por los siglos.
Bendito tu nombre, santo y glorioso,
a éL gloria y alabanza por Los siglos.
53Bendito eres en eL templo de tu santa gloria,
a ti gloria y alabanza por Los siglos.
54Bendito eres en tu trono real,
a ti gloria y alabanza por los siglos.
55Bendito cuando cabalgas sobre querubines
sondeando Los abismos,
a ti gloria y alabanza por los siglos.
56Bendito eres en la bóveda del cielo,
a ti gloria y alabanza por los siglos. 

Explicación.

3,51-90 El autor griego inserta un himno inspirado en el Sal 136 por el artificio letánico y en el 148 por la invitación universal. Quizá existió como himno autónomo. En el presente contexto se carga de nuevo sentido.

Dura era un escenario universal de los súbditos del Emperador; los cantores en el horno se abren a un escenario cósmico. La banda del rey, música instrumental, convocaba a jefes y súbditos al homenaje de la estatua; la voz humana de los jóvenes convoca el universo al elogio unísono de Dios. En vez de holocaustos de aroma que aplaca, brota ahora el "sacrificio de los labios", la ofrenda musical de la alabanza. Dios no acepta por ahora el sacrificio de la vida de sus fieles, se contenta con el sacrificio del testimonio heroico y de la alabanza entusiasta. 

La serie se divide cómodamente en: seis invocaciones dirigidas a Dios, una invitación universal y seis celestes, diez a los meteoros, ocho a animales y siete a hombres. Tiene menos rigor y concentración que el Sal 148. Toda la creación se une al coro de alabanza cuando la convoca la palabra humana. De este modo el hombre ejercita su señorío sobre la creación, nombrándola de nuevo (cfr. Gn 1) Y dándole órdenes desinteresadas. Así se la somete para someterla a Dios, cerrando el círculo que comenzó en la creación. 

3,53-54 Templo y trono celestes, del rey del cielo 

3,56 La bóveda es el firmamento.

EVANGELIO. Lucas 21,1-4.
1 Alzando los ojos vio a los ricos que echaban sus donativos en el tesoro del templo;
2 vio también a una viuda muy pobre que echaba unos céntimos 
3 y dijo:
- Esa viuda, que es pobre, ha echado más que nadie, os lo aseguro;
4 porque todos ésos han echado donativos de lo que les sobra: ella, en cambio. sacándolo de su falta, ha echado todo lo que tenía para vivir.

EXPLICACIÓN.

Con el ejemplo de la viuda muestra Jesús que Israel no podía satisfacer a Dios dándole lo superfluo, sino con su entrega total a él (cf. 10,27). Dios no necesita cosas, quiere la confianza total de la persona.

2ª OPCIÓN.

Primera Lectura. Isaías 61,1-3.
1El espíritu del Señor está sobre mí,
porque el Señor me ha ungido.
Me ha enviado para dar
una buena noticia a los que sufren,
para vendar los corazones desgarrados,
para proclamar la amnistía a los cautivos
y a los prisioneros la libertad,
2para proclamar el año de gracia del Señor,
el día del desquite de nuestro Dios;
para consolar a los afligidos,
los afligidos de Sión;
3para cambiar su ceniza en corona
su luto en perfume de fiesta,
su abatimiento en traje de gala.

Explicación.

61,1-9.11 Acepto la inversión de 10 y 11, con la cual el v.10 pasa a la perícopa siguiente, y el capítulo se articula en dos partes: vocación y misión del mensajero, mensaje de esperanza. El capítulo tiene numerosos contactos verbales con el 58.

61,1-3a En el tercer bloque del libro, estos versos funcionan como relato de vocación: véanse 42,1-4 y 49,1-6. Como en 40,9 su misión es pregonar una buena noticia. Para la tarea está equipado con el carisma del espíritu (48,16). Promulga un año jubilar de parte del Señor: Lv 25,10. "Desquite": porque el Señor paga a sus enemigos por su agresión; "gracia": porque resarce al pueblo de sus sufrimientos (Mt 11,5; Lc 7,22). Por su posible ambigüedad, suprimió Jesús la frase del desquite cuando leyó el rollo en la sinagoga de Nazaret (lc 4,18s), El gozo cambiará los ritos de luto en ritos de fiesta: Sal 30; lo contrario de Is 3,24.

61,3b-9.11 Dificultan la lectura los cambios de persona verbal: segunda persona plural en 5-6, tercera en el resto; habla el Señor en 8, se habla del Señor en el resto. Con todo, el conjunto se entiende como anuncio del heraldo en nombre de Dios.

61,3b El camino queda sellado con la imposición de un nuevo nombre. Por el paralelismo, refiero "el Justo" al Señor. Asignando función adjetival al término, resulta "Robles legítimos", semejante al "vástago legítimo" de Jr 23,5.

Salmo. 40,2.4.7-11.

2 Yo esperaba con ansia al Señor:
se inclinó a mí y escuchó mi grito.
4 Me puso en la boca un canto nuevo
de alabanza a nuestro Dios.
Muchos al verlo quedaron sobrecogidos
y confiaron en el Señor.
7 Sacrificios y ofrendas no los quieres;
me has cavado oídos;
no pides holocaustos ni víctimas expiatorias.
8 Entonces yo digo: "aquí he venido".
En el texto del rollo se escribe de mí
9 que he de cumplir tu voluntad:
y yo lo quiero, Dios mío,
llevo tu instrucción en las entrañas.
10 He proclamado el derecho
a una asamblea numerosa.
No he cerrado los labios,
Señor, tú lo sabes.
11 No me he guardado en el pecho tu justicia,
he anunciado tu verdad y tu salvación,
no he negado tu lealtad y fidelidad
a la asamblea numerosa.

Explicación.

40,2-4 El comienzo es una secuencia en cuatro escenas rápidas. Un hombre se debate en el lodo de una ciénaga, que amenaza tragárselo aprovechando sus esfuerzos; grita. Alguien lo saca y coloca sus pies en roca firme. Al sentir la solidez bajo los pies, rompe a cantar de gozo y agradecimiento. Un grupo que asistía expresa su confianza en el liberador.

40,2 La forma enfática traduce la expectación, casi la impaciencia del aguardar.

40,4 "Poner en la boca" es fórmula de alcance profético: Dt 18,18; Jr 1,9; 5,14.

40,7-9 Es importante apreciar paralelismos y correlaciones. En esquema: sacrificios / holocaustos, oídos / escrito, vengo / quiero. El primero es un merismo que abarca el culto. El segundo sugiere un encargo oral y uno escrito. El tercero es correlativo del anterior y se articula en dos piezas complementarias: el acto de presentarse y la disponibilidad para ejecutarlo.

40,7 Los sacrificios se relativizan (Eclo 34,18-35,26). "Cavar los oídos" es metáfora única. La imagen parece fijarse en la hondura corporal que abre el oído hacia el interior del hombre: compárese con Is 50,4s.

40,8b-9 Lo que más interesa del texto es la asimilación del encargo y por implicación del tema. Lo que estaba en un "escrito", pasa a estar "en las entrañas"; el texto de la proclamación está amorosamente asimilado. Compárese con Ez 3,3.

40,10-11 La proclamación se enuncia en cuatro verbos y seis sustantivos. El insistir en formas negativas, el apelar al testimonio de Dios, hace sospechar algún riesgo en el encargo, como si algo grave indujera al silencio. El verbo positivo, "evangelizar", significa en la vida civil anunciar una buena noticia. Es típico del profeta del destierro, que también tropezaba con resistencia y hostilidad: Is 40,9; 41,27; 52,7 y 60,6; 61,1; Sal 96,2. El "derecho" recurre también en Is 41,2-10; 42,6.21; 45,19; 51,1.5.7. Los otros sustantivos, con posesivo "tu", pertenecen a una tradición ancha, también presente en el salterio.

Ahora imaginemos que ha comenzado la predicación, que provoca resistencia, oposición, persecución; el orante invoca el auxilio de quien le encomendó la tarea. Es lo que sigue en 12-18.

TRANSPOSICIÓN CRISTIANA.

La carta a los Hebreos recoge y comenta la parte central del salmo, según la versión griega de los LXX. En vez de "me cavaste oídos", dice "me aparejaste un cuerpo"; traduce "rollo" por "título". De este modo opone el autor a los sacrificios antiguos la entrega del Mesías. De aquí arranca el uso de los antiguos de poner todo el salmo en boca de Cristo y después en boca de la Iglesia.

Evangelio. Mateo 5,13-16.
13 Vosotros sois la sal de la tierra. Y si la sal se pone sosa, ¿con qué se salará? Ya no sirve más que para tirarla a la calle y que la pisotee la gente.
                   14 Vosotros sois la luz del mundo. No se puede ocultar una ciudad situada en lo alto de un monte;
15 ni se enciende una lámpara para ponerla en el candelero y que brille para todos los de la casa.
16 Empiece así a brillar vuestra luz ante los hombres; que vean el bien que hacéis y glorifiquen a vuestro Padre del cielo.

EXPLICACIÓN.

13 - 16. La sal, factor de incorruptibilidad, símbolo de la permanencia de la alianza (Lv 2,13; Nm 18,19; 2 Cr 13,5). La luz, la gloria o esplendor de Dios que había de brillar sobre Jerusalén (Is 60,1-3). Los discípulos son la nueva ciudad santa donde Dios habita (cf. 27,53). La gloria se manifiesta en su modo de obrar (5,7-9), en el que los hombres reconocen a Dios como Padre.

LECTURAS DEL JUEVES 21 DE NOVIEMBRE DEL 2024

2 OPCIONES. 1ª OPCIÓN. Primera Lectura. Apocalipsis 5,1-10. APOCALIPSIS. ÍNDICE. 1 En la diestra del que está sentado en el trono vi un roll...